sábado, 7 de octubre de 2017

Reseña: Ladrones de libertad

DATOS DEL LIBRO

Título: Ladrones de libertad
Autor: Iria G. Parente y Selene M. Pascual
Año: 2017
Editorial: Nocturna Ediciones

Sinopsis: La tripulación del Angelique está orgullosa de ser lo que es: una tripulación de piratas. Su día a día consiste en navegar por los mares de Marabilia entre aventuras, asaltos a barcos y búsquedas de riquezas; en definitiva, los piratas del Angelique viven sin acatar leyes ni obedecer órdenes de nadie. Hasta que el rey Geraint de Dahes los captura y todo apunta a que eso se ha terminado. La pena por piratería es la muerte. A no ser, claro, que alguien les proponga un trato que les permita salvarse... Uno que a su vez ofrezca la posibilidad de una venganza muy ansiada. Ante un tesoro tan valioso como la libertad, cualquier precio parece escaso.

«Supongo que queremos creer que alguien nos escucha allí arriba o que hay un espacio en el cielo que siempre podremos ocupar, reservado para nosotros, donde vivir en paz. Supongo que nos obsesiona la idea de dejar una marca en este mundo.»

Venid. Sentaos. Os contaré una historia.

Érase una vez que se era, dos niñas que soñaban con dar voz a multitud de historias. Crearon un mundo lleno de leyendas, magia y personajes cuyas aventuras merece la pena contar. Primero, se embarcaron en un épico viaje por las tierras de este mágico continente surgido de los trazos de sus plumas y los tecleos de sus ordenadores, Marabilia, en el que buscaban gloria para un joven príncipe, maestría para un joven hechicero y la oportunidad de empezar de nuevo para una joven, según describen, en apuros. No mucho después, sus plumines volvieron a destilar tinta para narrar la increíble historia de un par de jóvenes nigromantes que deben abandonar la seguridad de su torre de aprendizaje para encontrar un importante antídoto y que, por el camino, deberán enfrentarse a todo tipo de situaciones con las que muchos no se atreverían ni a soñar. La suerte volvió a sonreírles a los que, por aquel entonces, ya no podían imaginarse a sí mismos sin dedicarles parte de sus corazones a esas historias y esos personajes, ya que las intrépidas autoras se atrevieron, una vez más, a dar vida a una novela tan única como devastadora, una novela que robó los corazones de los lectores y los hundió en las profundidades de los mares de Marabilia, donde sus dueños jamás pudiesen encontrarlos ni, por supuesto, recuperarlos.

Nos permitieron explorar la inmensidad de los mares de Marabilia desde la privilegiada posición del castillo de un barco pirata, y de la mano de una tripulación de bellacos a los que no les tiembla el pulso a la hora de enfrentarse a quienes intenten interponerse en sus planes. Esta tripulación de nueve hombres, fieros piratas, cayó en las garras del poderoso rey de Dahes que, en lugar de echarles la soga al cuello y colgarlos ante todo el pueblo por sus crímenes, les ofreció un trato de libertad y venganza que no pudieron rechazar. Así comienza una historia frenética e inigualable en la que no todo es lo que parece, los prejuicios se desmontan y hasta la luna llena guarda secretos.

Estas jóvenes autoras regalaron a sus lectores el poder de sentir por medio de las palabras, de reír a carcajadas y llorar a lágrima viva, de querer con todo el amor de sus corazones y sufrir las contrariedades en sus propias entrañas. Con sus palabras trajeron al mundo a personajes grises, como ellas mismas solían afirmar, a reputados piratas cuyos deseos y sentimientos más profundos sorprendieron a todos cuantos se atrevieron a navegar entre aquellas páginas cargadas a rebosar con magia y espadas y que desprendían cierto olor a sal marina y ansias de libertad. Describieron en gran detalle situaciones apasionantes en las que muchos pudieron sumergirse para encontrar la paz, la tranquilidad y la evasión que, a veces, solo la ficción puede brindar. Dieron voz y visibilidad a muchos colectivos que, tristemente, aún hoy, no reciben el mismo trato y respeto que los demás. Hicieron partícipes a todos los valientes que se embarcaron a bordo del Estrella fugaz de trepidantes aventuras a las que podrán volver siempre que deseen. También los hicieron llorar, de esa forma en la que solo se puede hacer cuando el dolor en el corazón te oprime el pecho y solo consigue aliviarse en estado líquido, en forma de lágrimas.

Sin saberlo, con sus novelas, estas autoras les ofrecieron a todos los que quisieron la posibilidad de desaparecer durante un ratito y perderse por las tierras de Marabilia, de encontrar en sus palabras la fuerza y la energía que en los momentos duros no conseguían hallar, de seguir adelante, porque, si lo consiguen estos personajes antes sus adversidades, los demás también pueden, con esfuerzo, con ganas y, sobre todo, con esa pizca de ilusión y esperanza que transmiten historias como la presente.

Cuando sus piratas estuvieron preparados para zarpar, invitaron a todos a celebrarlo con ellas. Atendieron a todos sus lectores, escucharon sus experiencias en el barco pirata, los invitaron a unirse si aún no lo habían hecho y les regalaron brújulas que les ayudaran a marcar el rumbo de esta aventura. En un último agradecimiento y como en otras ocasiones anteriores, dejaron por escrito las palabras que todo lector enamorado de sus historias desea leer: «A Marabilia, ya lo sabéis, podéis volver siempre que queráis».

Yo me despido hoy de esta historia que me guiado en este tiempo de relativa oscuridad, de estos personajes que han arrojado luz sobre los días que he compartido con ellos y de estas autoras a las que espero volver a leer pronto. Porque Marabilia ya es parte de mí y no puedo imaginarme la vida sin hacer una visita de vez en cuando. Porque hoy, esta novela cuyas cubiertas aún acaricio con las puntas de los dedos obtiene la máxima valoración por mi parte. Porque esas niñas no solo soñaron con dar voz a historias, sino que lo consiguieron. Porque espero que las voces de esas historias y de todas las que queden por venir nunca se apaguen. 


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